El Gobierno indultado por segunda vez a cuatro mossos d’Escuadra (policía de Cataluña) por haber torturado a un hombre al que confundieron con un atracador. La justicia los condenó a cuatro años y seis meses de prisión.
El Gobierno español en el primer indulto rebajó la pena a dos años, para que, al carecer de antecedentes penales, los condenados no tuvieran que ir a prisión, pero la Audiencia (en una sentencia tan poco convencional como ejemplar) mandó a los mossos a chirona por “peligrosidad criminal, repulsa y alarma social”.
Así que el Gobierno ha concedido un segundo indulto para impedir que los polis parezcan malos.
¿A qué se debe esta diferencia de opiniones?
El Gobierno debe pensar que cualquier ciudadano, incluso un policía, puede confundirse.
La Audiencia debe pensar que la tortura no admite excusa.
Gana el Gobierno, perdemos todos.
La tortura no es un error.
