Noviembre 28. The question

Hace algún tiempo hubiéramos agradecido la música. Ahora también hace falta la letra.

Hans Kung lo resume de otro modo: “Evangelii gaudium es a este respecto una etapa importante, pero ni de lejos la meta”.

Cuando, a finales de la dictadura, cualquier signo mínimo valía para echárselo a la cara a los representantes de aquel poder omnímodo, algunas frases, reflexiones e incluso encíclicas papales (no digamos un concilio) podían servir a los más descreídos para incrementar el argumentario opositor y los apoyos a los críticos del régimen.

En ese ambiente hasta las vacilaciones se sumaban al saco del no, porque el del sí exigía certezas rotundas. Así pasaron como izquierdistas, por poner a alguno, el cardenal Montini, personajes singulares como Martín Vigil o ideologías tan adversas a una auténtica transformación de la sociedad como el nacionalismo.

A algo de esto huele, por el momento, el papa Francisco.

Hay palabras suyas que podrían servir para alentar dudas a tantas certezas (de los suyos) y, en ese sentido, cabría valorar sus intervenciones con cierto interés, como hace el propio Kung, pero aún parecen demasiado alejadas de la lucha contra los poderes reales de esta sociedad (e incluso contra los de la iglesia).

¿No puede o no quiere más? Si no puede, ¿para qué sirven los gestos ambiguos, salvo para confundir y abortar cualquier iniciativa efectiva? Si no quiere, ¿para que darle importancia?

¿Alguien cree que algún día pasará de las musas al teatro? Ese es el gran dilema dramático: to be or not to be. En verdad, en verdad os digo que that is the question.

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La patronal alemana contra el pacto de gobierno de la CDU y el SPD: “el contrato es una oportunidad perdida y una señal de estancamiento”, comentó el jefe de la Federación de la Industria Alemana. El problema más grave estriba en el salario mínimo exigido por los socialdemócratas: “tendrá un efecto lamentable sobre el mercado laboral”, proclamó el presidente de la patronal.

– La lucha de clases es una antigualla, proclaman los mercados.

– Se lo van a tener que explicar a los empresarios.

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