La política que arruina la política

¿Cuál es la esencia de la política?

¿Cuáles las reglas del juego político?

¿En qué medida las reglas que se aplican determinan la esencia misma de la política?

 

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La política es el medio para conseguir un espacio común de convivencia, de justicia, de solidaridad o, si se quiere, para transformar la realidad y acercarla a aquellas aspiraciones colectivas.

El poder es solo un instrumento para desarrollar aquellos objetivos. Y por ello

Sin embargo, la política se analiza y se propone casi exclusivamente desde la perspectiva del poder o, mejor, de la lucha por el poder.

Y ese hecho tiene consecuencias: la política deja de ser el medio para transformar la realidad y se convierte en el instrumento para alcanzar el poder. Lo otro queda, si queda, para después. La prioridad es la que es.

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Lo ratifican a diario los partidos políticos, los debates parlamentarios, los análisis de los medios de comunicación, las tertulias de taberna… Los politólogos han arruinado a los políticos que todo ciudadano debería llevar dentro.

La derecha esconde sus verdaderos objetivos. La izquierda pierde sus referencias, olvida sus objetivos primordiales.

La política se torna indigna e incluso indecente.

 

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