
Hay discusiones que no se zanjan nunca por la vía directa. Los interlocutores exponen razones contrapuestas, irreconciliables. En muchas de esas ocasiones ni siquiera se aproximan los datos de partida. Y eso aboca a una situación sin remedio…, salvo que se aborde de costado.
Se abandona el fondo de la cuestión y se observa el decorado, la liturgia, la orquestación y concluye la polémica. Una parte abandona, nada que añadir, la otra se sonroja.
¿Tendrá sentido debatir mientras dure la vergüenza, propia o ajena? Hay vergüenzas que aspiran a ser eternas.
¿Cuál es la herencia más preciada de Chávez? Quizás ayude a resolver la duda el sucesor Maduro. Él ya exhibe su personal legado: el chandal.
Los niños deben viajar hacia atrás. Resulta mucho más seguro que mirar hacia delante. Dirección General de Tráfico. Gobierno de España.
Carlos Floriano es un imprescindible, como Mato o Cospedal o Montoro. En realidad puede ser solista en cualquier cuarteto. Si alguien duda, que preste atención.
La última del paisano: “La libertad de información tiene que tener límites”. Por ejemplo, que informe él. No porque no sea de fiar, sino porque nadie entendería nada. Tal vez, porque como ya se ha dicho por aquí, es que no se entera.
