Desquiciamiento de contrarios

Arrastramos meses de reclamaciones nacionalistas que la derecha considera de izquierdas y que la izquierda identifica de derechas.

¿España y Cataluña avanzan con esos planteamientos y actitudes previas? O mejor, ¿avanzan los españoles y/o los catalanes? ¿O se trata, simplemente, de  fijar los objetivos en forma de competición en lugar de priorizar las competencias? ¿En quién da más o menos, en quién recibe menos o más? ¿Es ese “el” asunto a despejar?

¿Los acuerdos PSOE-ERC resuelven algo? ¿Para qué? ¿Para quién? Tal vez ha llegado el momento de reconocer que nada mejor para ellos que lo peor para todos.

Conclusión personal: Cuando lo peor es lo mejor, tal vez lo mejor sea peor… y después, irse.

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