Por la igualdad, abolición de la herencia

Ahora que los impuestos han ascendido al primer plano del debate público, conviene aprovechar la circunstancia y profundizar en la fiscalidad que debe corresponder a una sociedad solidaria. No caben descalificaciones en función del autor de la propuesta ni degradar la cuestión con apriorismos.

Hay algo que se debería incluir en el debate y que rehuyen incluso quienes dicen luchar por la igualdad. ¿Cuándo replantear la fuente principal de esa desigualdad? ¿Por qué no cuestionar hasta el fondo el impuesto de sucesiones hasta abolir la herencia?

El silogismo es simple: si el mayor motivo de desigualdad es la herencia, ¿por qué no acabar con la herencia?

¿Se podría garantizar con esa medida un salario universal?

Thomas Piketty (El capitalismo del siglo XXI) ha planteado en repetidas ocasiones estos asuntos, aunque de manera, ciertamente, más compleja que la sugerida en estas líneas.

 

 

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